martes, 10 de agosto de 2010

RAZONES

Te quiero,
no por ser mi rutina, sino por ser mi razón,
por ser el aire que me da vida,
aquel que me guía, me acompaña y me recorre.
Te quiero,
no por ser mi compromiso,
sino por ser mi mejor decisión,
por pasar de ser mi sueño para ser mi único sentido.

Te quiero,
no por los momentos a tu lado,
sino por el segundo de tu ausencia en que me es imposible imaginar mi vida sin ti.
Te quiero,
no por ser mi sol,
sino por ser la luna que le da vida a mi oscuridad.
Por pasar de ser una ilusión para ser mi realidad,
por darme la necesidad de dejar de soñar para vivir mi despertar a tu lado.

Te quiero,
no por ser todos mis pensamientos,
sino por ser mi filosofía,
por quererme y no intentar cambiarme,
por mantenerme sobre la tierra
y encontrar aquí más sentido que alcanzar el cielo.

Te quiero,
no por adorar tus ojos
sino porque amo la manera en que me miras,
por entenderme,
por ser la razón para creer,
y simplemente, por ser lo mejor que me ha pasado.

Y te amo...
no porque te quiero,
sino porque a tu lado
comprendo que hay algo mejor más allá del universo.